Donde antes había erosiones en Caldas, muchas veces se ven obras de estabilidad con el sello de Corpocaldas. También es una entidad reconocida por sus campañas ambientales, por el cuidado de las fuentes de agua y por la protección de la fauna y la flora, entre otros aspectos. Incluso trabaja también impulsando la construcción sostenible en el departamento.
No en vano fue reconocida como una de las mejores corporaciones autónomas regionales del país, en diciembre del 2020. Corpocaldas obtuvo el tercer lugar entre 33 corporaciones del país en el Índice de Evaluación del Desempeño Institucional (IEDI), que realiza Minambiente. Una interesante antesala para su cumpleaños número 50, que se conmemora en este 2021.
También en gestión del riesgo, Corpocaldas aporta estrategias de gran valor, con herramientas tecnológicas y estudios de caracterización y zonificación de la amenaza, vulnerabilidad y riesgo. Estos se han constituido en insumos vitales para la revisión y ajuste de los POT de los municipios caldenses.
Los orígenes de Corpocaldas se remontan a diciembre de 1971 cuando se creó la Corporación Regional Autónoma para la defensa de Manizales, Salamina y Aranzazu (Cramsa), para controlar la erosión mediante una mezcla de ingeniería y bioingeniería. Esta entidad, bajo este objetivo salvó muchas vidas en su momento.
20 años más tarde se convirtió en Corpocaldas y hoy su director es Juan David Arango Gartner, quien había estado en el cargo entre 2008 y 2012, y regresó desde el 2016 a la dirección de esta entidad. La revista Construoferta sostuvo un diálogo con él y esto nos comentó.
¿A qué se debe que la entidad haya sido una de las mejores del país en el 2020?
Se ha consolidado el trabajo en gestión del riesgo y se ha desarrollado conforme a la ley en biodiversidad, servicios ecosistémicos, recurso hídrico, educación ambiental, conocimiento y participación comunitaria. Sobre todo, se ha mantenido la marca de una entidad técnica, transparente y cercana a la gente, gracias al relacionamiento con los grupos de interés.
¿Cómo es la relación de Corpocaldas con el sector constructor?
Es uno de los principales sectores que trabajan con nosotros en el tema ambiental. Hemos ido más allá del tema de autoridad, es decir, en el otorgamiento de permisos durante la construcción, como los de ocupación de cauce, aprovechamiento forestal en zonas rurales y la concesión y permiso de vertimientos.
A grandes rasgos, ¿cómo se trabaja lo ambiental con los constructores?
Hemos generado una agenda de trabajo, un gana-gana, que permite incorporar de una manera decidida y mucho más contundente la variable ambiental en los procesos productivos, no como una externalidad, sino como parte del negocio de la construcción. También hemos hablado de construcción carbono neutro y ojalá pudiéramos lograrlo mucho antes del 2050.
Y sobre construcción sostenible…
Venimos trabajando en un proyecto de construcción sostenible, con uso eficiente de los recursos naturales y con materiales del entorno como la guadua. También hemos desarrollado de manera conjunta estrategias para manejar adecuada y ambientalmente los recursos de construcción y demolición.
Cinco aspectos para aplaudirle a Corpocaldas en estos 50 años
Le preguntamos a Juan David Arango Gartner, director de Corpocaldas, cinco temas para destacar de la entidad:
1- La estrategia de gestión integral del riesgo, que se ha manejado particularmente en las zonas urbanas desde que se creó Corpocaldas
2- El tema de calidad del recurso hídrico, desde el punto de vista de ordenamiento y desde el saneamiento urbano y rural. Hemos aportado mucho en saneamiento de fuentes hídricas.
3- El trabajo en oferta hídrica y protección de ecosistemas estratégicos. Trabajamos en microcuencas abastecedoras de hoy y en el agua del futuro que está en páramos, humedales y otros tipos de sistemas altoandinos.
4- El trabajo sectorial que hemos realizado, con industriales, mineros, cafeteros, ganaderos, aguacateros y sector construcción, tratando de que la variable ambiental sea parte del negocio.
5- La educación ambiental -que ha sido un una línea fuerte- la participación comunitaria y el trabajo de comunicación, porque en lo ambiental, comunicar es educar.
